Por fin, una de las rutas que
tenía muchas ganas de realizar, pero por la dureza de la misma y las
circunstancias, no había podido llevar a cabo.
Hoy y gracias a mi e-bike, llegó
el día. Subimos tres almorzadores, todos con e-bike, mucho calor, pero
soportable. Hay que tener en cuenta que esta ruta transcurre a una gran altitud
y entre pinos, la mayor parte de la misma. Pedalear entre tanto verde, da una
sensación de increíble.
En esta ruta he probado, a fondo,
el motor de mi conway, un motor shimano, el EP8, que asistido por su batería de
630 W, desarrolla una potencia de 85 nw. Suave pero enérgico cuando lo
necesitas, silencioso, me ha gustado mucho su comportamiento en esta ruta tan
exigente.
Como negativa, se me salió, “literal”,
la biela izquierda y menos mal que fue subiendo. Se puso, con el apriete que
permitió la herramienta que portábamos y ¡sorpresa! Se volvió a salir, en otra
subida a pleno esfuerzo. Muy desagradable sensación que me ha dejado “muy mal
sabor de boca”. Espero que las consecuencias de la incidencia, solo queden en
la anécdota y no tenga consecuencias, ni en el eje, ni en la biela.
Bueno, como os contaba, al llegar
a las antenas, las vistas son impresionantes, estamos a casi 1.200 mts de
altitud., exactamente a 1.194 mts., una pasada. La bajada, estaba pensada por
los neveros, pero dado el incidente de la biela y no fiándome mucho, decidimos
bajar por la carretera, donde, también pusimos a prueba los frenos, que dicho
sea de paso, funcionan de maravilla, aunque el calentón no se lo quita nadie.
Parar una bicicleta de veinticinco kilos, con un biker de ochenta y cinco kl,
en unas pendientes, que en la mayoría de los casos supera el 20 %, ya tiene que
frenar. Puedo decirlo, dan confianza.
Luego el almuerzo, en Xirau, naturalmente.
Aquí se reflexiona sobre todo lo acontecido, se sacan conclusiones y recargan
las pilas. Una buena ruta, donde hemos puesto a prueba nuestras e-bikers,
calificación “10 sobre 10”.
Besitos y abracitos para
todos/as.
Los paisajes son increibles
Satisfacción por la ruta recorrida
Xirau, no decepciona