¿Estoy volviendo al pasado?
Puede ser, quizás, sin darme
cuenta, me metí en una máquina del tiempo, la cual me devolvió a años atrás,
cuando un gran grupo recorría estos parajes, con mecánica, claro está. Se
llenaban las monturas de barro, mucho barro, cuando llovía claro, por estos
lares llueve poco y cuando lo hace, pues para adelante como los de Alicante.
1ª salida con mecánica: Hoy le ha
tocado el turno al barranco del grifo, una ruta que, tiempos atrás, suponía una
mañana de grandes esfuerzos y grandes “almuerzos”, en los que la vuelta suponía
un doble esfuerzo, pero que nos llenaba al 100 %. Desde que llegaron las
e-biker, todo cambió, esta ruta es, casi una transición, para otras.
Bueno, hoy la hicimos, Carles y
un servidor, a la vieja usanza, sufriendo en las subidas (yo) y controlando en
las bajadas (yo). Volvemos a la rueda de 27’5, más pequeña, más estrecha, menos
seguridad, nada de ayuda. ¡Madre mía! Y era así en todas las salidas, no nos
imaginábamos lo que sería tener una montura, con ruedas de 29, mucho más balón
y con una ayuda extra. ¡La vida!
Imaginaros que se os rompe el
móvil o el ordenador y tenéis que volver al lápiz y el papel, duele pensarlo,
¿verdad?, pues así me siento yo sin mi e-biker.
Lo que no cambia es que, cuando
llueve la bicicleta se llena de barro y como no, “el almuerzo”, hoy en Torrellano, un ¡SERRANITO!,
tan bueno si llevas mecánica, como si vas en e-biker. ¡Menos mal!
Al final 52,38 km, no es mucho pero antes lo considerábamos un “rutón”.
"SERRANITO" un quitapenas.
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