¡Por fin llego la cosecha! Dicen
que, “quien la persigue, la consigue” y en esta ocasión a la tercera “ha ido la
vencida”.
Tengo que empezar, para que os hagáis
una “pequeña” idea de lo conseguido, exponiendo los datos que quedaron
registrados en nuestro GPS. (Bicicleta “mecánica”)
-Km
recorridos: 65.74
-Media
13.59 km/h
-Máxima:
53.67 Km/h
-Tiempo:
4:45:00
-Consumo
de calorías (en mí): 4.595 Kcal
-Pendiente
positiva superada: 1.283 mts.
Todo no puede ser perfecto,
bueno, como notas negativas, los frenos de Carlitos que le dieron la
problemillas en esta ocasión y el cierre del restaurante de la Rabosa. Aun así,
estos “problemillas”, no deslucieron ni un ápice el recorrido, además y para
hacerlo más espectacular si cabe, una niebla espesa, nos aguardaba casi en la
cumbre de Palomaret y que nos acompañó hasta Rabosa.
“La Rabosa” hoy nos recibe con un
silencio, una tranquilidad casi melancólica, una paz, solo rota por nuestro
alborozo, nuestra satisfacción, por
haber llegado. Luego la bajada, poca distancia hasta Rincón Bello, pero en esta
ocasión nos aguardaba una sorpresa, que, casi, podía haber dado al traste con
nuestra gran ruta de hoy. El camino hacia Rincón, ¡cortado!, lo que nos hizo coger la senda por el barranco,
pensada para senderistas, no para bicicletas. ¿El que peor lo pasó? Carles y su
e-biker. Arrastrar por escarpados peñascos, agua, zarzas que parecían no querer
dejarte pasar, esta montura de más de 25 kg, no fue tarea fácil, pero como
sucede en la vida, “no hay mal que cien años dure” y cuando nos quisimos dar
cuenta ya estábamos en Rincón Bello, de ahí a Agost, ya un paseo.
Ya es Agost, nos esperaban el
resto de “almorzadores”. Maira, Emilio y
Karmele, esta última, convaleciente de su operación de hombro. Bueno, a partir
de aquí, es fácil adivinar lo que sucedió, ¡Homenaje! Y bien merecido, las
reservas ya estaban en un nivel bajo, pero en “NOU PALACIO”, siempre nos han
tratado bien. Y como nos pasó bajando hacia Rinco Bello, cuando nos quisimos
dar cuenta ya estábamos con las pilas al 100 %. Bueno y como últimas sorpresa,
Juanma, aparece y se toma una cervecita con nosotros, ¡bien!
La vuelta la hicimos por el
camino real de Agost, salimos a la Marchosa y a casita. Hoy nos ganamos un “pequeño”
descanso.
Para que os hagáis una idea,
¡Flipante!
¿Que puedo deciros? rutas de estas son las
que hacen afición a este deporte
Bueno esta foto, no tiene desperdicio y como no,
tengo que compartirla con todos vosotros.
¡Soy yo!
Por fin en Rincón Bello
Y como no, fieles a la tradición, la última
junto a nuestro árbol
LA RABOSA por Palomaret
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