Ocho y media de la mañana del
sábado 12 de Febrero, nos encontramos Carles y un servidor, nadie más. Por lo
que decidimos comenzar la ruta. Hoy quedamos con Serxio en la Rabosa, para
almorzar.
El día se presenta nublado y
frío, pero eso no nos quita, ni la ilusión, ni las ganas de llegar hasta
nuestro objetivo, “LA RABOSA”. Ayer llame por teléfono para asegurarme que hoy
estarían abiertos, confirmado, hoy abren, así que esperamos tener un almuerzo de
lujo.
Con ayuda de nuestras e-bikers,
salvamos las pendientes que transcurren
por estos parajes, increíbles, de nuestra geografía. Bosques de pinos y tierras
de labor, se suceden, un coctel muy atractivo que se presenta ante nosotros.
Por fin llegamos, son las once de
la mañana y ya llegamos. “Comentario” ¡esto con mecánicas habría sido
imposible! Y es la pura verdad, llegar a las once de mañana a Rabosa,
increíble.
Nos sentamos dentro, pues húmedos
de sudor y el frío que hace, mejor al abrigo. Llega Serxio, bien, ya estamos
todos.
Comenzamos a almorzar, pedimos
tres menús, embutidos, a la parrilla, huevos fritos con patatas, cervezas,
carajillos y, como no, unos chupitos de herbero.
Serxio, se recupera muy, pero que
muy, satisfactoriamente, de lo que nos alegramos enormemente. La conversación,
amigable, anécdotas, planes de futuro.
Luego la vuelta, decidimos,
volver por la senda que nos llevará a Rincón Bello. Tenemos varios tramos en
los que tenemos que bajarnos de nuestras monturas, pero por lo demás, muy
rápido y directo. ¡Bien!
Al final una ruta muy, pero que
muy atractiva y divertida.
Besitos y abracitos para
todos/as.
Aun recuerdo aquellos tiempos en que las fotografías inundaban
el whasapp del grupo
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